Instagram cuenta con millones de usuarios, y el número crece cada vez más, por eso es muy común encontrar varios usuarios con el mismo nombre o con nombres muy parecidos, esto también facilita la proliferación de cuentas falsas y la suplantación de identidad.
Generalmente las cuentas falsas son creadas para emular cuentas de personas famosas y muchos usuarios caen en esa trampa creyendo que están siguiendo la cuenta oficial de alguna celebridad que admiran del mundo del espectáculo o del deporte.
Con el fin de evitar este tipo de estafas, en el año 2014 Instagram introdujo la posibilidad de verificar las cuentas para hacer saber a los seguidores que se trata de una cuenta oficial y no de una suplantación de identidad.
Las cuentas verificadas son fácilmente reconocibles por la marca de verificación azul o insignia de verificación que aparece al lado derecho del nombre del usuario. Cuando sigues una cuenta con marca de verificación, esto te garantiza que la persona a la que sigues es la verdadera propietaria de esa cuenta.